Salsa de Chiles y Tomatillos Asados

4 Pasos para completar

• 1
  Coloca los chiles poblanos directamente sobre la parrilla de la estufa. Ajusta el fuego del quemador al nivel más alto y coloca los chiles poblanos directamente sobre el fuego. Con unas pinzas, voltea los chiles hasta que la piel quede completamente asada. Coloca los chiles poblanos en una bolsa de plástico por 5 minutos. La piel se afloja en lo que el chile se humedece. Coloca los chiles poblanos sobre una servilleta de papel y suavemente remueve la piel con la servilleta. Corta el tallo, haz un corte a lo largo de los chiles y descarta las semillas y las venas.
• 2
  Cubre un comal o sartén con papel aluminio. Precalienta por 2 minutos a fuego medio.
• 3
  Coloca los tomatillos, cebolla, chiles serranos, y ajo sobre el papel aluminio y asa los ingredientes hasta que queden doraditos, alrededor de 8 minutos. Con unas pinzas, voltea los ingredientes para que se asen uniformemente. Remueve y tira la cáscara del ajo.
• 4
  Transfiere los ingredientes a una licuadora junto con la sal y el agua. Oprime el botón de pulsar en la licuadora unas cuantas veces hasta que la salsa tenga a una consistencia martajada. Vacía la salsa a un tazón. ¡Sirve y disfruta en tacos y quesadillas!